Google, quizás una de las mayores empresas en Internet de la historia (recordemos que empezó a crecer en el boom de las .com), que más se ha aprovechado de internet (es donde reside una gran parte, por no decir toda, de su negocio), está matando la web.
Google, que se inició en la libertad de internet para subir su web, hacerla accesible y usada miles de millones de veces al día, está matando su propia web. Web a la que ellos han ayudado a crecer.
¿Y por qué digo que Google está matando la web? Porque Google Chrome está matando la web. Está matando la innovación, está matando la posibilidad de elección, está matando la libertad.
No sé si recordáis los oscuros años 2000-2005, donde todo el mundo tenía instalado Internet Explorer 6. Un navegador que no se actualizó (llegó al 97% de cuota de mercado) porque no le hacía falta: era el rey, y se conformó. Obligó a hacer «estándares» para Microsoft, pasando de todo el mundo, pasando de una web interoperativa. Pasando de innovar y estandarizar.
Google está haciendo lo mismo: está obligando a que muchas de sus aplicaciones web SÓLO se puedan usar con Google Chrome. Google ha ayudado a estandarizar muchas cosas, pero se está equivocando. Muy, mucho.
Angry Birds para Chrome funciona perfectamente en Firefox, Ópera, Safari… pero lo dicen.
El soporte offline de Gmail sólo lo hacen funcionar en Google Chrome, cuando perfectamente se podría utilizar LocalStorage de HTML5 para hacerlo funcionar en múltiples dispositivos.
Y lo último, el otro día quería probar Google Currents Producer:
Nada, sólo Chrome.
Sólo espero que Google cambie de parecer y haga lo que ha hecho desde sus inicios: apoyar una web abierta, libre, y, como hicieron ellos, poder innovar desde cualquier sitio y de cualquier manera, no estando atados a una única tecnología.